Serenata para orquesta de cuerdas op. 22 en Mi mayor

Esta edición no persigue el imposible de intentar aproximarse a la edición que Dvorák habría deseado, sino el más terrenal propósito de corregir los errores evidentes de las ediciones anteriores aplicando criterios de uniformidad basados en la propia obra y empleando la información de especialistas que se han aplicado en la detección de tales errores (P. Conover, responsable del archivo de la Biblioteca de la Orquesta de Filadelfia, las notas del archivo de la Orquesta del Conservatorio de Nueva Inglaterra, la edición de Norman del Mar Orchestral Variations, o nuestras propias correcciones realizadas en el seno del Concurso Internacional de Dirección de la Orquesta de Cadaqués). También hemos tenido la fortuna de revisar los materiales personales de Sir Neville Marriner, hecho éste muy valioso ya que, si bien el material de un director difiere mucho de lo que una edición necesita, nos ha puesto sobre aviso en cuestiones tremendamente importantes como. Nuestro objetivo fundamental es, pues, ofrecer a directores y ejecutantes una edición en la que en la partitura y en los materiales se hayan ya resuelto las imprecisiones y se hayan ya revisado los errores históricos.