Capilla del Sol: La música colonial latinoamericana no está en capilla

El creciente interés por la recuperación y reinterpretación del repertorio colonial latinoamericano se manifiesta en la reciente proliferación de trabajos discográficos. A pesar de las dificultades que se presentan para acceder a ediciones fiables de este repertorio, no son pocos los conjuntos que han registrado sus interpretaciones llegando a trabajar directamente con las fuentes.
Hasta hace poco más de cinco años podían encontrarse con dificultad dos centenares de discos sobre música colonial, la mayoría de los cuales presentaban una calidad técnica y musical deficiente o, desde un enfoque más actualizado, resultaban demasiado generalistas. No por ello dejamos de reconocer el mérito de estos intérpretes e investigadores que dieron inicio e impulsaron la aparición de conjuntos más rigurosos. Si bien entonces era habitual la elección de un repertorio heterogéneo sin reclamar ninguna argumentación, hoy nos resulta algo más difícil aceptar en un mismo programa repertorio civil, misional, catedralicio o parroquial procedentes a su vez de latitudes y altitudes distanciadas en miles de kilómetros y compuestas por compositores anónimos o conocidos como Zípoli, Salazar, Gutierrez Padilla, Ceruti, Juan de Araujo, Sumaya, Torrejón y Velasco o Esteban Salas (por sólo mencionar algunos).
Pero algo está cambiando. La especialización y las pretensiones de la audiencia exigen interpretaciones más ajustadas al entorno en el que surgieron las obras, mejor argumentadas y, por sobre todas las cosas, con un alto nivel interpretativo.
La mirada prudente sobre las ediciones, la aproximación a las fuentes originales y la creatividad a la hora de interpretar se plasman en un resultado musical vivo y lleno de interés. Los integrantes fusionan su formación especializada en música antigua y repertorio folklórico, para otorgar un sonido característico a la formación.Si nos vamos para atrás una década encontramos que la conciencia sobre la existencia de un repertorio vasto y aún por descubrir en el ámbito discográfico motivó el surgimiento de algunas apuestas que se han prolongado hasta hoy. Aunque altamente cuestionable por su concepción y de una calidad poco aceptable, recuerdo la labor antológica llevada a cabo por el programa Repsol YPF para la Música de Latinoamérica que comenzó en 1998 con la publicación de una colección en una caja arcón con varios títulos con música de Cuba, Argentina, Guatemala, Ecuador, Bolivia, Colombia, Perú, Venezuela, Panamá, México y Brasil. Del mismo modo el sello francés K.617 ha lleva publicados, dentro de su serie Baroque latino-américain, aproximadamente una cuarentena de discos monográficos sobre repertorio colonial. En esta colección se destaca el criterio uniforme con el cual se elaboran los diferentes trabajos discográficos. A partir de 2005 comenzaron a salir los volúmenes de Bolivian Baroque a cargo del Ensemble Florilegium dirigido por Ashley Salomon como resultado de las ediciones e investigación de Piotr Nawrot. Actualmente llevan tres volúmenes en los cuales se manifiesta cierta tendencia a la creación de un estereotipo producto de una mirada eurocéntrica. Lamentablemente la calidad musical ha ido decreciendo del primero al último de los volúmenes. Recientemente me ha sorprendido la aparición de un disco realizado por el Ensemble Caprice de Canadá dirigido por Matthias Maute por su calidad musical. Sin embargo, una vez más, la selección del repertorio no parece responder a ningún criterio que permita vincular las obras que trascienda el mero hecho de su proveniencia latinoamericana. Por otra parte tampoco escapa a la reelaboración tópica e idealizada de un repertorio que necesariamente ha de ser llamativo y debe tener evidentes rasgos "latinoamericanos". Sucediendo a pioneros como Robert Stevenson o Curt Lange que iniciaron la recuperación del repertorio y de la descripción archivológica de los espacios catedralicios coloniales, trabajan intensamente especialistas de todo el mundo como Piotr Nawrot, Geoffrey Baker, Bernardo Illari, Miriam Escudero, Lauro Ayestarán, Dante Andreo o Javier Marín. El resultado de sus investigaciones nos acercan más datos sobre estas músicas para poder atender a sus particularidades. Algunas agrupaciones recientes obedecen a estas diferencias adecuando su interpretación a los diferentes contextos, épocas, estilos, géneros e idiomas e intentan elaborar versiones más ajustadas y no por ello menos novedosas. La Capilla del Sol, es un ya consolidado ensamble argentino que desde sus inicios, en 2004, ha abordado la música colonial desde un enfoque crítico y desprejuiciado. La excelencia interpretativa de sus integrantes sustentada por una intensa labor de investigación realizada de manera permanente por el director, Ramiro Albino, ha abierto el camino para que el conjunto realizara diversas presentaciones en Latinoamérica. Recientemente tras su gira europea (Eslovenia, República Checa y España) la agrupación recibió muy buenas críticas. La mirada prudente sobre las ediciones, la aproximación a las fuentes originales y la creatividad a la hora de interpretar se plasman en un resultado musical vivo y lleno de interés. Los integrantes fusionan su formación especializada en música antigua y repertorio folklórico, para otorgar un sonido característico a la formación. El disco titulado Como pudieran en cualqueir catedral nunca puede resultar monótono ni tan sólo a oídos poco familiarizados con la música colonial latinoamericana. El contraste entre las obras escogidas radica en las diferencias funcionales de las obras que son, a su vez, reforzadas por la recreación musical. En este caso existe un criterio rector que vincula las piezas: la reconstrucción hipotética de una misa en las Misiones Jesuíticas de Bolivia. Emulando el procedimiento que se seguía en las capillas misionales, se seleccionaron obras de archivos misionales que fueron a su vez transcritas por los musicólogos Piotr Nawrot, Sylvia Leidemann, Enrique Godoy o el mismo director del conjunto, Ramiro Albino; todas obras que formaron parte del repertorio de las Misiones de Chiquitos y Moxos. Como es de suponer para reparar y descifrar las fuentes en la edición y elaborar una interpretación a partir de esta edición se requiere una preparación específica. En el caso de la reconstrucción de repertorio colonial, los intérpretes se topan con la dificultad de tener que “vestir” la música. Algunas piezas de factura aparentemente sencilla, resultan sumamente difíciles de recrear sin un análisis profundo. Otras piezas se han conservado de manera fragmentaria y los musicólogos han optado por reconstruir las partes faltantes y recurrir a documentación adicional que suministre más detalles sobre el uso y maneras de las percusiones y los demás instrumentos, sobre el registro natural de las voces o sobre el la manera de ornamentar. Del mismo modo han de imaginar la posible hibridación con ritmos, instrumentos y maneras de hacer locales. Una de las cualidades de este disco es que no se detectan artilugios ni exceso de imaginación. Nada parece arbitrario y a su vez las obras se presentan impregnadas de un carácter propio distinguiéndolas de obras de similar función y estructura compuestas en Europa. Es un verdadero gozo escuchar este registro técnicamente ajustado y de gran nivel, características que sigue siendo difícil de encontrar en discos de música colonial. El empaste y la similitud tímbrica de las voces y la naturalidad en la ejecución instrumental otorgan a las piezas esa frescura que creo muy apropiada si se quiere reconstruir el contexto espiritual y simbólico. No aparecen leyendas ni tópicos que alimenten la expectativa de los oyentes, tampoco se facilita el discurso para hacerlo más próximo a la audiencia. Simplemente se ha realizado un trabajo razonado, sólidamente argumentado y técnicamente bueno. Confío en que este trabajo de la Capilla del Sol sea el primero de una serie discográfica que nos descubra otros repertorios y sus consiguientes maneras de entenderlo pudiendo así obtener su merecida aceptación internacional. La música colonial está consolidando su sitio en las programaciones de todo el mundo en busca de reestablecer el lazo cultural que une desde hace siglos Europa y América. [caption id="attachment_5145" align="alignright" width="300" caption="Capilla del Sol"][/caption] CD “Como pudieran en cualquier catedral” CAPILLA DEL SOL Adriana Sansone, Silvina Sadoly, Soledad Molina, Isabel Barrios (sopranos) / Cecilia Pahl (mezzosoprano) / Pablo Tavaglino (alto) / Diego Sorá (tenor) / Alicia Morán, Virginia Llansa (violines) / María Jesús Olondriz (cello) / Evar Cativiela (guitarra y vihuela) / Federico Ciancio (arpa) / Cristina García Banegas (órgano) / Eduardo Rodríguez (bajón) / Sergio Bazán (percusión) / Ramiro Albino (flauta y dirección) Buenos Aires, 2010 Este trabajo fue producido sin afán de lucro por lo que su circulación es gratuita.
Compartir: